Es desconcertante que debido a la falta de recursos económicos las personas se queden sin estudiar, en donde tengan un futuro descrito de pobreza y desigualdad. La movilidad social describe el rumbo económico de las personas. Si la movilidad social señala que la economía de las familias está descendiendo, el individuo que pertenece a esas familias tiende a no progresar ya sea momentánea o prolongadamente.
La movilidad social en México funciona de una manera un tanto hereditaria, ya que las estadísticas revelan que un porcentaje de la población ha vivido económicamente de la misma forma que sus padres. Entonces ¿qué es lo que está sucediendo?,¿ Por qué estar destinados al progreso o a la miseria?
La sociedad mexicana puede responder a estas preguntas, pero porque no tratar de cambiar este pensamiento repleto de decadencia y transformarlo a una vida de éxito y prosperidad. Es necesario que en México se reconozca el esfuerzo de los individuos, olvidarse del egoísmo y la envidia para darle un impulso al país. Borrar la ignorancia de nuestro vocabulario y darle hincapié a la educación.
“Honor a quien honor merece”
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